Nayib Bukele: Gobierno quiere transformar una noticia catastrófica en un logro

Por Redacción UH

El  alcalde Nayib Bukele, calificó de “vergonzosa” la forma en la que el gobierno salvadoreño ha manejado la situación del anunció que confirma la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) y que deja en el aire a más de 200 mil salvadoreños y sus núcleos familiares.

«El gobierno salvadoreño quiere transformar una noticia catastrófica como un logro del gobierno, es un cinismo», acotó el edil.

Bukele dijo que hay intensiones de aprovecharse del desconocimiento de buena parte de la población  y se trataría de una campaña de desinformación.

«Tenemos una cancelación abrupta del TPS», remarcó a la vez que mostró su preocupación por el impacto en la economía salvadoreña. No obstante, considera  que «teniendo la crisis hay que verla como una oportunidad para buscar un estatus permanente para los compatriotas».

Las declaraciones  se dieron en el programa de CNN en Español, Conclusiones, espacio conducido por Fernando del Rincón.

El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, informó este lunes  “la cancelación de la designación del  Estatus de Protección Temporal (TPS) para El Salvador. Alrededor de medio millón de salvadoreños se verán afectados con la decisión.

El permiso de trabajo fue otorgado por el país norteamericano luego de que los terremotos del 2001 dejarán en situación de vulnerabilidad a El Salvador.

El Salvador es el país de la región centroamericana con mayor número de población migrante y la  situación es más preocupante si se considera que el aporte de las remesas se traduce en un  17.1 %del  Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Estados Unidos ya había denegado la prolongación de dicho tratado a países como Nicaragua y Haití, y en el caso de Honduras solo decidió darle prórroga por 18 meses más.

La preocupación es que  El Salvador, enfrentará mayor inestabilidad ya que no se cuenta con los recursos necesarios para hacerle frente a un revés  del beneficio. Pese a que varios funcionarios estadounidenses,  entre ellos congresistas y senadores expresaron su apoyo, Trump decidió la suspensión.