Eeileen Romero, la candidata a diputada que ha demostrado que su discapacidad física no es un impedimento

Por Redacción UH

Su discapacidad física no fue un impedimento para que Eeileen Romero cumpliera uno de sus sueños, ser abogada de la República de El Salvador.

Nació con el trastorno genético osteogénesis imperfecta que causa que los huesos se rompen con facilidad, este padecimiento también se conoce como huesos de cristal. Tenía 7 quebraduras sus huesos eran como cartílagos su cráneo era similar a una vejiga con bolsa Expreso la profesional quién Recuerda que pasó sus primeros meses de vida en una encubadora.

Su padre falleció cuando ella apenas tenía 8 años, lo que significó un duro golpe emocional y económico para su familia, desde entonces esta cerca de Dios y esto fue gracias a un hombre que le dijo que sus respuestas a sus preguntas estaban en él, desde entonces encontró esa fortaleza para continuar su vida.

«Y que lo importante era que mi familia me amará, que a pesar de la adversidad nunca olvidará que Dios siempre estaba conmigo y desde edad no se ha separado a Dios».

Desde pequeña Eeileen demostró ser una mujer luchadora. Ingreso al sistema educativo cuando tenía 16 años según ella fue difícil su etapa escolar porque existían tabus para las personas con discapacidad.

Recuerda que una vez en formación escolar, su mochila iba sobrecargada con sus libros de texto y cuadernos, el peso hizo que cayera con la silla de ruedas. Pero todos sus compañeros estuvieron listos para apoyarla en este momento.

Eileen Romero dijo que antes que finalizará la secundaria acompañó a su madre a centros penitenciarios para dar mensajes de esperanzas a los internos. Desde ese momento nació su deseo de ser abogada, tuvo obstáculos económicos, físico y discriminación.

» uno que otro catedrático quería demostrar que yo no era capaz y cuando llegue a la etapa de tesis, mis compañeros como sabían mi situación económica me decían que se iban a cambiar de grupo».  Pero demostró que su voluntad era más fuerte y finalizó la carrera.

Sus prácticas como profesional en derecho las realizó en un pueblo lo que significó para ella un sacrificio porque tenía que viajar en transporte colectivo amarrada a los asientos.

Pero eso no la detuvo actualmente trabaja como abogada ayudó a sus hermanos a concluir sus estudios académicos y espera que en un futuro no muy lejano obtener una especialización jurídica y trabajar en la ONU.