Todo contra Nayib, una estrategia desesperada

Por Redacción UH

“Hay que hacer TODO lo que se tenga que hacer para que Nayib Bukele no gane”, escribió Paolo Lüers en una de sus columnas en las pasadas elecciones municipales. Se trataba de un llamado desesperado a los dirigentes y financistas de ARENA. Hay que reconocer que, en el contexto del combate político estratégico, Paolo Lüers tenía toda la razón del mundo.

Resulta que Nayib no solo ganó sino que, además, el respaldo ciudadano a su liderazgo no ha dejado de crecer hasta llegar en la actualidad a la categoría de lo extraordinario según todas las encuestas, incluidas las patrocinadas por sus más enconados enemigos políticos. La clara previsión de ese crecimiento, y sus inevitables consecuencias en el plano de las competencias electorales venideras, fue lo que motivó la desesperación y el descaro de aquel llamado.  

Ahora bien, Paolo Lüers es terco y en ciertos temas específicos puede ser perverso y cínico, como en el caso de su insostenible defensa de esas estructuras criminales que son las maras, pero no es tonto. Alguna vez escribí que a veces incluso tiene destellos de genialidad, “en el sentido más oscuro y alemán de esa palabra si se piensa en Adolf Hitler y en Joseph Goebels”.

Pero con todo y ser el fruto de la desesperación ante la impotencia de vencer a Nayib, aquél llamado no era un grito al viento sino la expresión condensada de una estrategia perfectamente articulada y explicada a los más altos dirigentes y financistas de ARENA.

Hay que recordar que, cuando ARENA perdió las elecciones presidenciales en 2009, a uno de los primeros intelectuales que esos dirigentes y financistas consultaron para recomponer su estrategia fue a Paolo Lüers, y también que fue Lüers quien en la campaña de 2014 les recomendó, según lo ha reconocido él mismo, buscar el diálogo secreto y el pacto con los jefes de las maras, lo que se concretó en aquella siniestra reunión de Ernesto Muyshondt con los criminales en Apulo.

En este marco, y desde el punto de vista de los dirigentes y de los financistas de ARENA, la estrategia radical antiNayib recomendada por Paolo Lüers es ahora más vigente que nunca. Sobre todo si se considera que ARENA no tiene ningún candidato viable para competir contra Nayib, al respecto véanse la encuestas; y que si ese candidato de sacrificio fuese en efecto Ernesto Muyshondt, su fracaso sería la primera derrota del presidenciable arenero, Carlos Calleja, ya que Muyshondt es el miembro más destacado de su equipo político.

El otro factor que es preciso comprender es que, si bien ARENA perdió el Ejecutivo desde 2009, sus financistas aún conservan intacto el poder económico y mediático, a la vez que el control pleno de algunas instituciones capitales. Poner la totalidad de ese poder fáctico al servicio de la campaña contra Nayib Bukele es el centro de la estrategia arenera.

Ese diseño, claro está, parte de la idea de que, si dados los números es prácticamente imposible vencer electoralmente a Nayib, la única alternativa realista es “hacer todo lo se tenga que hacer” para eliminarlo de la competencia. Y si consideramos algunas trayectorias, y todo lo que está en juego en 2018 y 2019, no será muy difícil entender que aquí la palabra “todo” significa efectiva y literalmente TODO. Ese es el guión que comenzará a implementarse en los próximos días.  

Por: Geovani Galeas
Analista Político.