En el mundo hay 50 millones de niños viviendo fuera de sus lugares de origen, alertó la agencia de la ONU para la infancia, Unicef, en su nuevo informe.
Más de la mitad, 28 millones, han huido de sus hogares por los conflictos o la violencia. De ellos, 10 millones son refugiados, 1 millón solicitantes de asilo cuyo estatus aún no ha sido determinado, y unos 17 millones están desplazados dentro de sus propios países, detalló Unicef. Según la agencia de la ONU, las cifras muestran un porcentaje nunca antes visto: aunque representan un tercio de la población mundial, los niños y niñas constituyen cerca de la mitad de todos los refugiados.
En Desarraigados: Una crisis creciente para las niñas y los niños refugiados y migrantes, Unicef describe un panorama desolador sobre la situación en la que se encuentran los millones de menores afectados por los conflictos violentos.
Además del trauma generado por la violencia, estos niños deben enfrentarse a innumerables peligros durante sus travesías: el peligroso viaje por mar, sufrir desnutrición y deshidratación, o enfrentar el riesgo de ser víctimas de la trata, de secuestros, desaparición, violaciones e incluso de asesinatos, enumera la agencia de la ONU.
Pero las situaciones de riesgo no acaban en la travesía: tanto en los países que atraviesan como en los lugares de destino son, con frecuencia, víctimas de xenofobia y discriminación, que en el peor de los casos pueden llegar a convertirse en ataques. Solo en Alemania, las autoridades registraron 850 ataques contra los albergues de refugiados en 2015.
Unicef alertó sobre otra situación preocupante: la del cada vez mayor número de niños que cruzan la frontera sin la compañía de un adulto. Los niños y niñas no acompañados están más expuestos a sufrir diversos riesgos, como la explotación y abusos por parte de traficantes de personas.
En 2015, más de 100.000 niñas y niños no acompañados solicitaron asilo en 78 países, el triple que en 2014. En México, miles de niños centroamericanos o del interior del país migran sin la compañía de un adulto. La cifra de niños centroamericanos migrantes a 2015 fue de 35.704, de los cuales 18.650 iban sin el acompañamiento de un adulto.