Congruente con su política de austeridad, el presidente de la Asamblea Lagislativa, Norman Quijano, suprimió todas las plazas laborales, ya sea por contrato, ley de salario o cualquier otra modalidad, que hayan sido contratadas entre el 1 de diciembre del año pasado y el 30 de abril de 2018.
«Quedan suprimidas las plazas bajo cualquier modalidad de contrato que ingresaron entre el 1 de diciembre 2017 al 30 de abril de 2018», dijo en conferencia de prensa la tarde de este viernes.
Quijano también dijo que todos los vehículos asignados a gerentes, jefes y algunos empleados legislativos deberán ser utilizado única y exclusivamente para uso laboral y que al final de la jornada deberán quedar guardadas en la institución.
Además explicó que se revisará los contratos por servicios teléfonicos que se han adjudicado a diputados, gerentes jefes y empleados.
El diputado presidente añadió que pedirá a la junta directiva autorización para que los vehículos a que han renunciado los diputados sean vendidos en subasta pública. «Tenemos que poner orden administrativa y financieramente», destacó.
Según Quijano, las medidas anunciadas son producto del consenso que se ha construido en el seno de la junta directiva de la Asamblea Legislativa para superar esta situación crítica en las finanzas de la institución.