Los últimos dos gobiernos de ARENA y el primero del FMLN fueron los que más endeudaron al país, al grado de convertirlo en el tercer más endeudado de América Latina, según las estadísticas del Banco Central de Reserva de El Salvador, (BCR) y organismos internacionales como la el Banco Mundial y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El fallecido expresidente Francisco comenzó su mandato en 1999 cuando la deuda pública dejada por su antecesor, Armando Calderón Sol era de 4,322.95 millones de dólares, a su salida dejó una deuda de $7,305.00 millones; es decir que endeudó al país con $2,982.05 millones.
En el caso de Elías Antonio Saca, subió la deuda pública de 7,305.00 millones de dólares a $11,173.54 millones, o sea que la nueva deuda contratada por el gobierno de Saca fue de $3,868.54 millones.
Luego vino el gobierno de Mauricio Funes, que elevó la deuda pública de El Salvador de $11,173.54 millones a $15,691.24, convirtiéndose en el exmandatario que hizo la mayor cantidad de préstamos en la historia del país, monto que ascendió a $4,5171.70.
Según datos de Euromonitor International, hasta 2017 El Salvador tenía 61.5% de deuda pública respecto a su producto interno bruto (PIB), solamente superado por Brasil y Belice que registraron 83.4% y 92.3% de su PIB en deuda, respectivamente.
sin embargo durante el gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén el endeudamiento público de El Salvador ha continuado subiendo, al grado que tomó el país con una deuda de $15,691.24 millones y a lo que va de 2018 la ha elevado a $18,372.72, equivalente al 74.1% del PIB.
Después de El Salvador se ubica Uruguay con el 61,3%, luego México que tiene el 55,1%), convirtiéndose en los países que cuentan con una mayor deuda respecto al PIB.
“En América Latina hemos visto aumentar la carga de la deuda en varios países debido a los mayores déficits fiscales, el crecimiento económico más lento y la depreciación de la moneda. A medida que la recuperación se arraigue en las economías regionales y siempre que los gobiernos sigan controlando el gasto, podríamos comenzar a ver tendencias más favorables en la dinámica de la deuda”, dijo Shelly Shetty, lider del equipo de calificaciones soberanas para América Latina de Fitch, entrevistado por Euromonitor International, compañía investigadora de mercado.