La enorme trama de corrupción por sobornos millonarios de la constructora brasileña ‘Odebrecht’ ha tenido implicaciones en muchos políticos, diputados, senadores y presidentes de varios países de Latinoamérica.
La semana pasada se veía cómo se giraba una orden de captura contra el expresidente peruano Alejandro Toledo y cómo la fiscalía de Colombia aceptaba que había información que arrojaba que el presidente Juan Manuel Santos habría recibido un millón de dólares durante su campaña presidencial hace tres años. Estos casos se suman a las investigaciones en Brasil, Argentina, México, Venezuela, República Dominicana, Ecuador, Panamá y Guatemala.
Asimismo, la gigantesca red podría llegar hasta El Salvador y las hipótesis señalan al expresidente Mauricio Funes.
La información proviene de la estrecha relación que el exmandatario salvadoreño sostuvo con el publicista de la campaña presidencial que lo llevó a la victoria en 2009, Joao Santana, quien recientemente fue condenado a ocho años de cárcel por el escándalo Petrobras.
En 2008, Santana, quien era propietario en el país de la extinta agencia de publicidad Polistepeque, habría recibido $5.3 millones de dólares del contubernio entre el expresidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva y Odebrecht, con destino a los fondos de campaña de Funes.
Según información que dio el diario Folha de Sao Paulo en diciembre de 2016, la noticia implica a un testigo criteriado, de los más de 70 de lo compañía constructora, que reveló los detalles de la conexión con el exjefe de Estado salvadoreño.
Hasta el momento, aún no se ha involucrado la fiscalía salvadoreña, sin embargo, esta semana, el ministerio público colombiano ha convocado a una megarreunión entre colegas para compartir detalles de las investigaciones a nivel latinoamericano. Está prevista la presencia de representantes de Portugal, México, Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, República Dominicana, Venezuela, Antigua y Barbuda, El Salvador, Guatemala, Panamá y Mozambique.