Las secuelas de la corrupción en el aparato público son devastadoras a juzgar por el dinero que se roban los funcionarios, pero lo son mucho más al tratar de cuantificar aquellas obras de progreso social que pudieron haberse hecho en beneficio de la población, específicamente de los menos favorecidos económicamente, según el analista político Roberto Cañas.
«El efecto de la corrupción es devastador: No solo es el dinero perdido. Es lo que se dejó de hacer con el dinero. Hospitales, escuelas. Es fundamentalmente la pérdida de confianza en la política como una labor de servicio a la ciudadanía», escribió el analista la tarde de este miércoles en su cuenta de twitter.
Cañas se refirió así a los hechos de corrupción cometidos por los cuatro gobiernos de ARENA, que será el tema principal del programa Nuevasideas TV, la noche de este miércoles, que será analizado por él, junto al secretario general de NUEVAS IDEAS, Federico Anliker y el también analista, Paul Steiner, bajo la conducción del emisario de ese partido político, Mario Durán.
Una investigación realizada por el economistas, Salvador Arias, determinó que los actos de corrupción cometidos por ARENA desde la presidencia de Alfredo Cristiani hasta la de Elías Antonio Saca, suman más de 37,000 millones de dólares. Si a esa cantidad se le suma lo de las administraciones del FMLN, la cifra fácilmente se eleva a los $38,000 millones.
Esa cantidad de dinero sería suficiente para pagar toda la deuda pública del país, construir, equipar y dotar de medicinas a decenas de hospitales, aumentar y modernizar los centros escolares para dar una educación de calidad a quienes estudian en el sistema público y, en general mejorar las condiciones de vida de la población, todo ello sin la necesidad de subir impuestos.