La reforma a la Ley de Pensiones aprobada por los diputados de ARENA y del FMLN en 2017 golpeó el bolsillo de los pensionados y los trabajadores próximos a jubilarse.
Aquellas modificaciones fueron pactadas por los partidos políticos, especialmente ARENA y el FMLN con el entonces presidente, Salvador Sánchez Cerén, ya que el gobierno urgía de fondos para pagar su deuda previsional que se le vencía a finales de ese año.
Es decir que los partidos lo que buscaron fue sacar del apuro al gobierno que enfrentaba una millonaria deuda con las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y favorecer a estas, sin importarles golpear el bolsillo de los trabajadores cotizantes al sistema y a los retirados de su vida laboral
Debido a ello, el Presidente Nayib Bukele abogó este jueves porque se elabore una nueva ley de pensiones o se haga otra reforma a la vigente para corregir el error y garantizar una pensión justa a los trabajadores, ya que solo se necesitan 43 votos en la Asamblea Legislativa para su aprobación.