El primer grupo de participantes en las pruebas clínicas de una vacuna rusa contra el coronavirus que desarrollan el Ministerio de Defensa de Rusia y el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya fueron dados de alta del hospital militar Burdenko de Moscú.
Desde el Ministerio de Defensa señalaron que «el principal objetivo» de su participación en los ensayos fue comprobar «la seguridad y tolerancia a los componentes de la vacuna».
«A lo largo de 28 días después de la vacunación, los indicadores de las funciones de importancia vital de voluntarios se han mantenido dentro de los parámetros normales. No se han registrado fenómenos no deseados serios, quejas sobre el estado de salud, complicaciones o reacciones», explicaron en un comunicado.
En total, 38 personas se involucraron en las pruebas clínicas de esta vacuna, divididas en dos grupos de 18 y 20 integrantes.