Gustavo López Davidson renunció como presidente del partido ARENA tras sus fuertes vinculaciones al tráfico de armas, algunas que fueron facilitadas a las pandillas tras una supuesta sustracción de las mismas en el arsenal de la Fuerza Armada.
Nunca antes en la historia un presidente o líder de un partido había renunciado por ser investigado por el Ministerio Público, algo que da paso a confirmar su estrecha relación entre los índices de violencia y la comercialización pública de armas a estructuras del crimen organizado.
Cada día que pasa, el partido ARENA queda más en la deriva, ahora sin una cabeza que les dejó cuesta arriba su credibilidad frente a la población salvadoreña, tras conocer sus nexos y financiamiento a las pandillas para ganar elecciones anteriores.