El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) desestimó el recurso de casación presentado el pasado agosto por la defensa del opositor venezolano Leopoldo López y ratificó su condena de casi 14 años, informó su abogado, Juan Carlos Gutiérrez.
«Se declara inadmisible el recurso de casación, ya tenemos la posibilidad de intentar acciones internacionales», dijo Gutiérrez y explicó que con esta decisión del Supremo «el caso de López queda cerrado» en Venezuela.
La Sala de Casación Penal del TSJ desestimó el recurso de López por considerarlo «manifiestamente infundado», según un extracto de la sentencia publicada en la edición digital del canal privado Globovisión.
Leopoldo López fue sentenciado en setiembre de 2015 a 13 años y 9 meses de prisión por los delitos de instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio con relación a los hechos violentos originados al final de una marcha antigubernamental convocada, entre otros, por él, el 12 de febrero del 2014.
El mandatario estadounidense afirmó que «Venezuela debería permitir que Leopoldo López, un preso político y esposo, salga de prisión inmediatamente».
El encuentro se produjo en medio de una confrontación diplomática entre Estados Unidos y Venezuela tras la aplicación de sanciones económicas contra el vicepresidente venezolano Tareck El Aissami, acusado de tráfico de drogas.
Pese a haber declarado horas antes que no quiere «problemas con el señor Donald Trump», el presidente Nicolás Maduro respondió al conocerse el encuentro.
«Si nos agreden, callados no nos vamos a quedar; Venezuela va a roncar y va a roncar duro (…) El imperialismo ha llegado a un nivel de desprestigio jamás visto», manifestó.
También en españa se oyó la voz de protesta, donde los ex jefes de Gobierno Felipe González y José María Aznar se reunieron con el padre de Leopoldo López.
«Con presos políticos no hay democracia», afirmó el socialista González, quien aseguró que las cárceles venezolanas albergan a día de hoy a 110 personas por razones políticas, tras unos procesos judiciales que tildó de «arbitrarios».