Ha un mes de la “Noche Buena”, la Ministra de Salud, Ana Orellana, hizo un llamado a la población, padres de familia, a supervisar el uso de pólvora y más claramente aconsejó no invertir en ella y evitar casos de niños quemados como sucede anualmente en hospitales.
“Mi llamado es que a la gente ese dinero lo invierta en ropa para los niños, en juguete, en comida, pero no en pólvora que viene a causar daño y hace que los niños hasta puedan perder parte de su año escolar”, manifestó la Ministra Orellana.
Para la titular de Salud lo ideal es evitar la pólvora, pero recomienda que si un niño quiere disfrutar de las luces que generan los productos pirotécnicos sea bajo la supervisión de un adulto, es decir los padres de familia no bajo la mirada de otro niño de 15 años.
Durante la temporada de navidad y fin año muchos niños terminan en las camillas del Hospital Benjamín Bloom con quemaduras a causa de la manipulación de pólvora.
Este año hasta la fecha los informes de Salud no reportan quemados con pólvora, pero ya se acerca la temporada más complicada de celebraciones en el año y la vigilancia debe estar tanto para quien fabrica los pirotécnicos como quien los explota.
Mejor evitemos. Y si en caso quieren disfrutar con las luces con polvora que sea con la estricta supervisión de un adulto responsable. Y por adulto entenemos a los padres no un niño de 15 años.