La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, condenó las manifestaciones violentas que se han desatado en Venezuela por la «ilegitimidad» del gobierno de Nicolás Maduro, las cuales ya han dejado a 20 fallecidos y 350 personas detenidas,
«Estoy extremadamente preocupada por que la situación de Venezuela pueda escapar rápidamente de control, con consecuencias catastróficas», dijo la funcionaria.
La comisionada expresó su preocupación porque considera que la situación en ese país puede descontrolarse aún más y causar más fallecidos.
Miles de personas aún salen a protestar en contra del gobierno de Maduro tras considerar que el proceso es ilegítimo. Varios países, como Estados Unidos, han rechazado lo que llaman «dictadura».
