Las fuerzas de seguridad arrestaron a Zamora Marroquín, un importante crítico del gobierno de Alejandro Giamamattei, el 29 de julio en su casa por cargos de lavado de dinero, con intención de lavar dinero, venta de influencias y extorsión.
Según la fiscalía, el periodista recibió unos 38 mil dólares y no ingresaba regularmente ese dinero al sistema bancario, por lo que pidió ayuda a García Navarijo. Sin embargo, Zamora Marroquín se defendió diciendo que el dinero le sirvió como préstamo para que pudiera cumplir con sus obligaciones comerciales.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo el martes que estaba «preocupado» por la detención de Zamora Marroquín, así como por las medidas legales tomadas por el gobierno del país contra sus funcionarios judiciales.