La Fiscalía General de la República (FGR) y la defensa del expresidente Elias Antonio Saca, pactaron una nueva reducción, esta vez de ocho años, por el delito de cohecho activo, luego de que el exmandatario aceptara que sobornó con $10,000 a una empleada judicial para que le filtrara información en torno al proceso por el desvío de más de $301 millones de Casa Presidencial.
La audiencia especial ha sido programada para el próximo 24 de mayo en el Juzgado Noveno de Instrucción, en la que Saca aceptará ante la justicia haber cometido el delito de cohecho activo, que según el artículo 335 del Código Penal tiene una condena que va de seis a 10 años de prisión, pero el exjefe de Estado solo deberá pagar dos luego de que aceptara el cometimiento del ilícito ante la jueza Nora Montoya.
Des ser condenado a la pena máxima de diez años de prisión, el exmandatario solo cumplirá con dos, que le serán agregados a los diez que ya cumple por enriquecimiento ilícito en el caso «Destape a la Corrupción».