El Salvador junto a otros ocho países latinoamericanos son considerados como «democracias imperfectas», según el más reciente estudio del tanque de pensamiento alemán, Bertelsmann Stiftung, aunque añade que la problemática no es solo en América Latina, sino que también es a nivel global.
Los otros países, que como El Salvador son considerados «democracias imperfectas» son: Brasil, Panamá, Bolivia, República Dominicana, Colombia, Perú, Paraguay y México. Mientras Ecuador, Honduras y Guatemala están en la categoría de “democracias altamente imperfectas”; en tanto que Nicaragua, Haití, Cuba y Venezuela siguen siendo catalogados como modelos autocráticos.
«En todo el mundo la evaluación de la calidad de la democracia, de la economía de mercado y, en general, de los Gobiernos están en mínimos desde que se empezaron a recabar datos, allá por 2006. Pero en el caso concreto de Latinoamérica las señales de alerta que envía el último Índice de Transformación de la fundación germana son especialmente preocupantes: Hay signos en aumento de un síndrome por el que las élites políticas no logran ofrecer soluciones satisfactorias”.
La organización privada alemana detectan un bajo estado de ánimo social, alrededor de los regímenes democráticos, “alimentado por una creciente discrepancia entre las mayores demandas de los ciudadanos y la falta real o percibida de capacidad para resolver los problemas por parte de las élites políticas, cuya reputación se ha visto mermada por escándalos de corrupción en los últimos años”.
Este año será según Bertelsmann Stiftung una “dura prueba” para la solidez de las democracias latinoamericanas. Para enero de 2019, cuando vea la luz su próximo Índice de Transformación, al menos 13 países habrán celebrado elecciones presidenciales, pero ello no puede descartar que el panorama político experimente un cambio mayor, especialmente teniendo en cuenta el estado de ánimo antisistema que crece en la región.