A juzgar por los acontecimientos ocurridos en las últimas semanas en torno al trabajo legislativo, todo indica que la Comisión de Medio Ambiente retomó el tema de la Ley del Agua desde una perspectiva privatizadora para encubrir lo que estaban fraguando en torno al incremento del FODES.
Prácticamente haberle elevado el volumen a la conformación del Ente Retor del Agua, con la inclusión del mayor número posible de representantes del sector privado, desvió la atención de la propuesta de elevar el FODES del 8% al 10%, tal como fue aprobado ayer con 66 votos de ARENA, el FMLN y el PCN.
Mientras la mayoría de los salvadoreños estaban enfrascados en defender la no privatización del agua y presionando a los diputados de la Comisión de Medio Ambiente para que no incluyera a representantes privados en el Ente Rector del Agua, la Comisión de Municipalismo preparaba el dictamen favorable para subir el FODES.
Es decir que prácticamente todo lo acontecido alrededor de la Ley del Agua no fue más que una cortina de humo levantada por los diputados, en especial de la Comisión de Medio Abiente, para que nadie pusiera su atención en lo del FODES, cuyo aumento se hizo sin hacer las consultas pertinentes, y a sabiendas de que se afectarán más las deterioradas finanzas públicas.
Sin embargo esta decisión de los legisladores, especialmente los de ARENA y del Frente, además de pretender llevar desarrollo a los municipios, lo que en realidad busca es incidir negativamente en el buen desempeño que los salvadoreños esperan del nuevo gobierno, que bajo la conducción del Presidente Nayib Bukele tomará posesión el próximo 1 de junio.