Gracias a la «Ley de Imprenta», existente desde el 9 de octubre de 1950, los medios de comunicación impresos lograron que se les blindara de pagar impuestos, convirtiendo dicha ley, en uno de los negocios políticos más rentables de este país.
Guevara lo explica desde una perspectiva muy sencilla, para que se dimensionen esas siete décadas. «Han pasado 14 distintos presidentes, 5 juntas de gobierno, 12 años de guerra civil y el dinero de ellos continúa protegido, sin pagar nada por la venta de los periódicos», agrega.
Además de los Gobiernos, el candidaro a diputado expresa que, los más afectados han sido los salvadoreños, que han vivido décadas, que trabajaron por 30, 40 o 50 años y que hasta han fallecido y nunca pudieron decir que se vieron beneficiados por un centavo en educación, salud o seguridad de esos impuestos.
Actualmente, el modelo de los periódicos impresos ha dejado de tener prioridad y credibilidad, según menciona Guevara. Y hasta hace unos pocos años fue un negocio millonario del que se lucraron por décadas.
«Una página en un periódico valía miles de dólares, fácilmente les pagaban 4 mil, 5 mil o hasta 8 mil dólares. Más toda la publicidad que obtenían de jugosos contratos millonarios con los pasados gobiernos. Y todas esas ganancias fueron sacadas del país y están ahora escondidas en paraísos fiscales. Así de obscuro era ese modelo», dijo.
Debido a eso, nacen los ataques y difamaciones a los nuevos medios digitales, por esto es que han lanzado una campaña sucia en contra de los nuevos medios estatales como Noticiero 10. Porque el monopolio de la verdad se les acabó. Porque hoy ya no ponen ni quitan presidentes y esos le duele.
«Vamos a reformar la Ley de Imprenta, para que no les quede resquicios legales para eludir y evadir. Hoy sí van a pagar impuestos», concluye Christian Guevara.