El presidente legislativo, Norman Quijano, se opone a una reforma del Código Procesal Penal para que los delitos de corrupción no prescriban, es decir que sean elevados a juicio, independientemente del tiempo en que los exfuncionarios los hayan cometido.
En la actualidad hay una moción que busca reformar el artículo 32 del mencionado Código, para que «los delitos de corrupción no prescriban, sin embargo Quijano y otros diputados de su partido se oponen a que avance dicha iniciativa, presentada en mayo por el legislador independiente Leonardo Bonilla.
El partido tricolor, uno de los más manchados por escándalos de corrupción en todos sus gobiernos, la Corte Suprema de Justicia y la Asamblea Legislativa, se ha visto beneficiado con la prescripción de la acción penal de delitos vinculados a la corrupción, a pesar de que muchos de sus exfuncionarios se enriquecieron ilícitamente con el dinero público.
La pieza legislativa también propone que los delitos de corrupción puedan ser constitutivos de delitos de lesa humanidad y pueda ser justificable su no prescripción, pero la bancada de ARENA insiste en evitar que avance.
