El ex presidente de ARENA, Antonio Salaverría, ha caído en una contradicción que atenta con la independencia y credibilidad del Órgano Judicial. Por un lado, dice que hay “poderes” intentando manipular a los magistrados y al Presidente de la Corte Suprema de Justicia y por otro, reconoce públicamente que ha pedido una cita con el Dr. Armando Pineda para advertirle cómo proceder en un caso judicial que favorecería al empresario.
“Le pedí una cita al señor Presidente de la CSJ, Armando Pineda, la semana pasada cuando me entero lo que estaba pasando, anoche tuve ya el mensaje que me recibe jueves o viernes”, aseguró.
La revelación de la futura cita la hizo en un canal de televisión, donde se atrevió a advertirle al presidente Pineda “no dejarse manipular”, insinuando que como funcionario está propenso a hacerlo.
“Al doctor Armando Pineda Navas (presidente de la CSJ) le quiero decir que siempre he creído en tí, sé que sos un hombre correcto y espero que no te dejes presionar ni influenciar», sentenció Salaverría.
También le mandó un mensaje sobre cómo deben actuar el resto de magistrados de la Sala de lo Constitucional advirtiéndoles que deben tomar “la decisión correcta para salvar el sistema judicial, no el sistema financiero».
La revelaciones de Salaverría ponen en riesgo la credibilidad de la Presidencia de la Corte Suprema de Justicia, porque estaría pactando encuentros con un afectado en un proceso judicial que no se ha cerrado.
En el pasado Antonio Salaverría se ha visto implicado en casos judiciales. Por ejemplo, su nombre sonó mucho cuando se destapó el escándalo por el desvío de millonarios fondos provenientes de Taiwán para las víctimas del terremoto de 2001, dinero que terminó en manos de ARENA cuando él era su presidente.
Además, estuvo muy de cerca del gobierno del profesor Salvador Sánchez Cerén, pues fue promotor y firmante del “pacto por el café”, una iniciativa que prometía reactivar el parque cafetalero y de la cual no surgió nada. Salaverría, junto al ex presidente y reo confeso, Antonio Saca, promovieron la iniciativa en la campaña presidencial de 2014.