El volcán de San Salvador perdió mil metros de altura debido a erupciones de hace más de 60 mil años, de acuerdo a una investigación realizada por el geólogo Walter Hernández, del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y de Jefrie Brian Jicha, de la Universidad de Wiscousin-Madison de Estados Unidos.
Las erupciones anteriores a la del 1917 derrumbaron casi la tercera parte de la estructura superior del cono volcánico, según el estudio, que añade que mucha de esa gran masa de tierra se fue al fondo del volcán, tras la explosión y rellenó parte de la cámara magmática que se vació y otra parte bajó por las faldas del coloso.
En la actualidad el cráter Boquerón tiene una altura de 1,980 metros sobre el nivel del mar. Este cráter corresponde al nuevo volcán que se edificó en el interior del viejo molde que dejó la antigua estructura. Según los expertos, el coloso original podría haber alcanzado una altura cercana a los 3 mil metros sobre el nivel del mar.
Para llegar a ésta conclusión se analizaron los perfiles topográficos del complejo volcánico, y se analizó la actual ubicación del conducto del cráter Boquerón y su relación con la proyectada del antiguo conducto del San Salvador.
Estos resultados se compararon con el modelo de elevación digital del complejo volcánico, obtenido a partir de tecnología Lidar. Los resultados fueron sorprendentes al corroborar en ambos casos, que el conducto que alimentó al nuevo volcán se ha desplazado cerca de 750 metros al sur del conducto más viejo.