El asesinato de la salvadoreña, Victoria Esperanza Salazar, radicada en México con visa humanitaria, que fue asesinada por policías en Tulum, Quintana Roo, ha generado indignación el abuso policial con el que presuntamente policías asesinaron a la mujer.
Victoria tenía 37 años y desde hace tres años residía en México, ya que en aquel entonces el gobierno del FMLN fortaleció sus vínculos con las pandillas y el país registraba altos índices de asesinatos.
Su madre, Rosibel Arriaza, indicó en una rueda de prensa que su hija se fue para México porque no encontraba trabajo y que por eso se fue, para darle un mejor futuro a sus hijas para y sacarlas adelante. Dijo que Victoria hacía limpieza en hoteles de Tulum ya que es un lugar turístico.
