El presidente de los Estados Unidos de Norte América, Donald Trump, dejó abierta la posibilidad de tomar una acción militar en Corea del Norte tras las continuas provocaciones de Pyongyang, aunque insistió en su preferencia por una solución diplomática y en el papel clave de China para rebajar las tensiones.
«Si Kim Jong-un prepara una prueba nuclear, no estaré feliz. Y no creo que el presidente chino, que es un hombre muy respetado, esté feliz tampoco», afirmó Trump en una entrevista en el programa «Face the Nation» de la cadena CBS.
Acerca de la posibilidad de que EE,UU, recurra a una solución militar ante las acciones del régimen comunista norcoreano afirmó: «No lo sé, ya veremos». Eso fue lo que contestó, a pesar de que el Papa Francisco, ha dicho que una guerra nuclear sería devastadora para la humanidad.
Trump cree que el papel que China tome en esta crisis será clave, ya que es uno de los pocos interlocutores a los que Pyongyang presta atención.