La abogada Tahnya Pastor rechazó categóricamente que haya indicios de persecución política en el caso «Desfalco» que judicializa a exfuncionarios del FMLN y manifestó que en realidad lo que hay es «impunidad comprada que ya no pudieron pagar… con nuestros dinero».
Políticos y personas de oposición aseguran que la captura de cinco exfuncionarios del gobierno de Mauricio Funes y la orden de captura de otros cinco, obedece a intentos por silenciar a las voces críticas del actual gobierno, lo cual fue negado por Pastor, quien hizo un breve análisis del caso.
La abogada aseguró que exministros prácticamente «confesaron en sede fiscal haber conformado consejo para trasladar fondos sin reformar el Presupuesto General de la Nación, por medio de la Asamblea Legislativa, cuando el mecanismo de fondeo había sido declarado inconstitucional».
Agregó que no es congruente pedir libertad de los recién capturados, ya que los acusados anteriormente en el caso de Saca, todos enfrentaron el proceso en detención provisional, incluyendo a los exempleados de Capres que fueron condenados a largas penas de prisión.
«Nunca olvidemos, pueden hacer lo que quieran, pero eventualmente, y sobre todo a la hora de estar en el banquillo de los acusados, la verdad sale a la luz. Es cuestión de tiempo. Y para algunos, ese tiempo ya llegó», sentenció finalmente.