El presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén, rompió el silencio sepulcral que mantuvo en torno a la desastrosa pérdida de las elecciones del pasado domingo para su partido, y dijo que tomarán medidas y cambiarán algunas cosas por las que el pueblo les ha dado la espalda.
El mandatario dejó entrever que habrá cambios de funcionarios públicos al más alto nivel, en un intento de mejorar aquellas cosas que la población no ve bien y por la cual se expresó en contra del partido de izquierda el pasado domingo.
«Ningún ministro o viceministro está aferrado a su cargo y lo más importante es que la población sienta que los cambios son una realidad», dijo el jefe de Estado este sábado al inicio del programa Casa Abierta, dedicado a los logros de la alfabetización.
Asimismo expresó que acepta con humildad la decisión de quienes no fueron a votar o que expresaron su rechazo en las urnas al partido oficial. «Tomamos con mucha humildad los resultados de las elecciones, vamos a rectificar y tomar las medidas necesarias, y cambiar muchas cosas que la población no ve bien, y fortalecer lo que bueno», reiteró.
En los comicios municipales y legislativos del 4 de marzo, el FMLN bajó más del 400 mil votos, en comparación con los resultados de las elecciones del año 2015, producto, según analistas de la mala gestión gubernamental, comenzando por el presidente de la República, que ha sido el mandatario peor evaluado de la historia democrática de El Salvador.
Ningún ministro o viceministro está aferrado a su cargo y lo más importante es que la población sienta que los cambios son una realidad, presiente @sanchezceren en #CasaAbierta
— Secr. Comunicaciones (@GobSV_Comunica) 10 de marzo de 2018
Tomamos con mucha humildad los resultados de las elecciones, vamos a rectificar y tomar las medidas necesarias, y cambiar muchas cosas que la población no ve bien, y fortalecer lo que bueno. pic.twitter.com/WDenJUvebm
— Salvador Sánchez (@sanchezceren) 10 de marzo de 2018