La polémica se desató en la entrega de los Globos de Oro, pues no solo ocurrió en el politizado discurso anti-Donald Trump hecho por la actriz estadunidense Meryl Streep, al recibir su estatuilla honorífica Cecil B. DeMille, también lo hizo la amorosa reacción de Ryan Reynolds y Andrew Garfield al revelarse que su colega, el canadiense Ryan Gosling, era merecedor al premio en que también él competía, en la categoría de Mejor Actor en Musical o Comedia por «La La Land».
Los amigos, famosos por ambos ser parte del universo de superhéroes de Marvel, el primero como Deadpool y el segundo por haber sido Spider-Man, tras escuchar la decisión del jurado en la 74 entrega de los premios y saber que no era favorecido Reynolds, Garfield lo tomó del cuello y le dio un beso de consolación en plena boca mientras Goslyng subía la escalinata a recibir su estatuilla.