Norman Quijano, acusado por el testigo criteriado en el caso «Operación Cuscatlán», de pedir a cabecillas de pandillas antes de las elecciones del 2014 que sus miembros y familiares votaran por él a cambio de $1 millón, ahora se hace la víctima y niega haberse reunido con ellos.
A su regreso de Serbia, donde participó en una reunión de presidentes de congresos de todo el mundo, Quijano dio hoy una conferencia de prensa y emitió un comunicado en el que negó haber financiado a grupos criminales, pese a que, en la declaración jurada ante el Juzgado de Sentencia A, el testigo criteriado «Noé» lo acusó categóricamente.
«Jamás me he reunido con pandilleros para negociar absolutamente nada, mucho menos ofrecido dinero…», dijo al dar lectura al comunicado, en el que arremetió contra el Gobierno de estar detrás de las acusaciones en su contra y reiteró ser víctima de una infamia, que busca acabar con su carrera política.
La semana pasada «Noé», testigo criteriado presentado por la Fiscalía General de la República, afirmó en la audiencia judicial que Quijano se reunió antes de las elecciones con pandilleros días antes de las elecciones 2014.
La reunión fue con «el Snyper», «el Chivo de Centrales» y «el Cisco», de Santa Tecla, afirmó «Noé».
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Hoy, en conferencia de prensa reafirmo que jamás me he reunido con pandilleros para negociar absolutamente nada, mucho menos ofrecido dinero. Jamás he tenido en mis cuentas las cantidades que se me adjudican y nunca manejé dinero en la campaña presidencial. pic.twitter.com/iaYIxYlHMB
— Norman Quijano (@norman_quijano) October 21, 2019
