Miles de protestantes en varias regiones de Bolivia salieron a las calles, ante un escrutinio que perfila de nuevo a Evo Morales como ganador de los resultados de las elecciones, tras un supuesto fraude electoral por lo que decidieron incendiar las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral de ese país.
Los resultados del conteo veloz, conocido en Bolivia como Transmisión Rápida Electoral Preliminar, obligaban una segunda vuelta.
El aparente triunfo preliminar de Morales ha causado indignación en ese país y el evento electoral está siendo cuestionado también por la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Evo Morales, el actual presidentes de Bolivia busca perpetuarse en el poder ya que ostenta el puesto desde el 2006, es decir más de 14 años.