Previo a la reunión que sostendría el Mandatario salvadoreño se le preguntó respecto a cuál era su postura respecto a Venezuela, a lo que el Presidente Bukele respondió: «Venezuela merece elecciones libres que no supervisadas por el mismo régimen, sino supervisadas por la comunidad internacional».
Desde su llegada al Ejecutivo salvadoreño, el Presidente sentó postura que no apoyaría al régimen de Maduro en Venezuela, ni el de Ortega en Nicaragua. Esto último provocó la molestia de la izquierda y a su vez que éstos cerraran varias gasolineras Alba para no ser investigadas.
Venezuela fue apoyado por el gobierno del FMLN pese a que el régimen sucumbió al país sudamericano en una de las peores crisis de la historia, y éste era el «modelo» que la izquierda salvadoreña seguía.
