Un total de ocho trabajadores de una empresa eléctrica y tres agricultores fueron asesinados con machetes, escopetas y fusiles en el caserío La Flor del cantón Agua Escondida en San Juan Opico, a manos de criminales de la pandilla 18, el 3 de marzo de 2016.
La guerra entre las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13), 18-Sureños y 18-Revolucionarios dio un extraño giro cuando un grupo de pandilleros de la 18-R llegó hasta Opico, bastión de la MS-13, en busca de miembros de la mara contraria.
Al no hallarlos, según el reporte oficial, se cebaron con ocho empleados de una compañía eléctrica y tres jornaleros que pasaban por allí, también asesinados de forma cruel.
Los trabajadores de la compañía eléctrica se encontraban colocando algunos postes y los tres jornaleros iban pasando por ahí. No preguntaron. No cuestionaron nada. Los ataron de las manos y al primero le dispararon, luego desnucaron a machetazos a otro, después ametrallaron al resto y para terminar los remataron a machetazos, mientras uno de ellos grababa entre risas con su teléfono la escabechina.