Países Bajos ha entrado en recesión técnica durante el segundo trimestre del año, debido a la caída en las exportaciones del país y a la disminución del consumo interno, siendo el segundo periodo consecutivo de caídas en 2023.
«Ahora se necesita estabilidad y previsibilidad, por lo que debemos tener cuidado de no perturbar la economía y también de aumentar los impuestos», declaró la ministra de Asuntos Económicos de Países Bajos, Micky Adriaansens.
Esta es la primera vez que Países Bajos entra en recesión desde la pandemia por COVID-19, posicionando al país en un momento difícil al sumarse a la renuncia de su primer ministro, Mark Rutte, anunciada en julio.