El diputado de ARENA y excandidato presidencial, Norman Quijano, arremetió contra el gobierno haciendo la pregunta: ¿Cómo esperar un buen gobierno de alguien surgido de un fraude?
Quijano hizo una reseña de los acontecimientos presentados durante la primera y segunda vuelta de las últimas elecciones presidenciales en 2014, y el excandidato responsabilizó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) de haber permitido un fraude para que el candidato del FMLN, Salvador Sánchez Cerén, haya sido proclamado ganador.
El exalcalde capitalino también señaló al expresidente de la República, Mauricio Funes, de haber sido participe del «fraude» al hacer campaña en plena jornada electoral durante la primera vuelta.
Otro de los señalamientos sostenidos por parte de Quijano, son las acusaciones hacia el FMLN al utilizar presuntamente la Dirección de Centros Penales para que reos salieran a votar, y también los trabajos territoriales ejercidos por el partido de izquierda para involucrar a pandilleros en el proceso electoral para perjudicar a ARENA.
Ante ello, el legislador del partido ARENA, catalogó al mandatario, Salvador Sánchez Cerén como primer presidente «ilegítimo» de El Salvador en este siglo; y a su vez expresó que sea el último.
Para Quijano todo ello ha llevado a que el gobierno actual esté sumergido en la «incapacidad» por lo cual Sánchez Cerén no se encuentra a la altura política de ser el presidente de todos los salvadoreños, sostuvo.
Los únicos beneficiados de este proyecto gubernamental actual son los militantes del FMLN, para ello citó la última encuesta publicada por la UCA, donde solo un 20% de la población está satisfecha con la gestión Sánchez Cerén. Pues para los correligionarios del frente su objetivo es «destruir» El Salvador y establecer una dictadura basada en políticas fracasadas.
Debido al actual panorama, Quijano expresó que se presenta una buena oportunidad para ARENA de cara a las próximas elecciones donde los electores reafirmen nuevamente la confianza al partido tricolor que ostentó la presidencia de la República por 20 años ininterrumpidos.
Para ello el diputado exhorta a los suyos a cumplir un proceso transparente y totalmente apegado a los estatutos y Ley de Partidos Políticos, que fortalezcan la democracia en El Salvador.