Desde que el gobierno ecuatoriano inició la implementación del modelo Bukele en su país, los homicidios pasaron de 40 diarios a 12, lo que supone una reducción del más de 60 % de los asesinatos.
Esto ha incidido en que la popularidad del presidente, Daniel Noboa, se haya disparado y goce del más del 80 % de aceptación ciudadana, pese a ello, enfrenta otros grandes desafíos: las extorsiones y los secuestros.
Noboa prometió replicar las recetas exitosas del Presidente, Nayib Bukele, en El Salvador, debido a que el país enfrentaba una ola de violencia, parecida a la del país centroamericano, que pasó de ser el más violento de la región al más seguro.
El mandatario ecuatoriano sacó el ejército a las calles, además realiza intensas requisas al interior de las cárceles y realiza pruebas de ADN a los internos que les brinda información importante.