El expresidente Mauricio Funes y su ex esposa Vanda Pignato han sido llamado este lunes a una audiencia probatoria para que la Fiscalía General de la República (FGR) y la defensa deben presentan las pruebas en el proceso que se sigue contra ellos por supuesto enriquecimiento ilícito.
Vanda brindó declaraciones al llegar a la cámara; solicitó justicia y a la vez que dijo confiar en el sistema judicial.
Funes fungió como mandatario desde el 2009 al 2014, y su gestión se caracterizó por el destape de algunos casos de corrupción gestados en los gobiernos del partido ARENA.
El proceso civil contra el expresidente y su exesposa es tramitado en la Cámara Segunda de lo Civil de San Salvador y es en este proceso que autoridades determinarán con base en las pruebas presentadas por la Fiscalía si Funes y su esposa se enriquecieron de forma ilícita de fondos del Estado.
El expresidente y exesposa son señalados por más de 700 mil dólares. Actualmente Funes se encuentra asilado en Nicaragua, país que le recibió en septiembre de 2016, mientras que la exprimera dama funge como secretaria de Inclusión Social.
Si se prueban los señalamientos, tendrían que devolver los bienes e inhabilitado para aspiración de cargo público por diez años.