El prófugo expresidente y ahora nicaragüense Mauricio Funes ha salido al paso en defensa de Rodolfo Salume por los recientes cierres de empresas de alimentos que incumplían los estándares de elaboración de productos comestibles.
Ciertas empresas de Salume no contaban con la autorización de funcionamiento, y otras no cumplían con los requisitos que el Ministerio de Salud exige para la manipulación de alimentos. Sumado a eso el hurto de los fondos para pensiones, renta y seguro social que no fueron reportados pero sí se les descontaba a los trabajadores.
Estas prácticas del empresario Fito Salume, aparentemente, se desarrollaron durante la gestión Funes (2009-2014) por acuerdos abajo de la mesa que no afectaron el bolsillo del empresario.
El Ministerio de Trabajo, en conjunto con el Ministerio de Salud, responden a denuncias hechas en ambos sentidos, y el cierre temporal de estos establecimientos es para, de acuerdo a la ley, que tengan el tiempo de superar observaciones pendientes en inspecciones sanitarias y laborales.