El requerimiento de la Fiscalía General de la República contra políticos que pactaron por la sangre de salvadoreños inocentes con las pandillas, revela que el expresidente del FMLN, Mauricio Funes, autorizó a las tres principales maras asesinar 2 personas diarias cada uno, o sea 6 entre las tres organizaciones.
«Autorizan asesinar a dos personas diarias por pandilla y depurar dentro de los penales a las personas que cometían algún tipo de infracción (…) previa coordinación con quienes hacían la petición y posteriormente la trasladaban a CAPRES», especifica el requerimiento.
Las órdenes salían de los centros penales a Casa Presidencial, donde Mauricio Funes aprobaba todo lo que con las pandillas se habían negociado a cambio del poder político y victorias electorales.