El coronavirus ha cobrado la vida de más de 18,000 personas en el mundo en las últimas 24 horas, un récord desde que estalló la pandemia, mientras que la nueva cepa británica y sudafricana continúan propagándose.
El número de contagios en el mundo ha superado los 100 millones y, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante británica está presente ya en 70 países; y la sudafricana en 31.
La cifra confirma una tendencia observada desde principios de mes. Los umbrales de fallecimientos diarios se superan más rápidamente y la curva se va aplanando en cifras cada vez más altas (de media, 14.000 decesos diarios desde el 22 de enero, contra los 10.000 de finales de noviembre).