Tras varios días de haber sido expulsado del FMLN, el alcalde de San Salvador, Nayib Bukele, anunció la noche de este miércoles, el movimiento político «Nuevas Ideas», con el cual inicia su camino hacia la presidencia de la república.
Bukele destacó que se trata de un movimiento horizontal, donde los dos únicos requisitos para que los salvadoreños se incorporen son que quieran lo mejor para el país y sumar en vez de restar.
El alcalde llamó a toda la población a formar grupos en pasajes, barrios, cantones, caseríos y municipios para sacar a los partidos, que las encuestas señalan que, por lo menos el 75% de la población ya no los quiere, porque está harto de ellos, especialmente de las dos fuerzas políticas mayoritarias.
Lea a continuación el mensaje del alcalde de San Salvador:
«Muchas gracias por permitirme llegar hasta sus casas. En los últimos días todos han estado escuchando a los políticos tradicionales de los partidos mayoritarios, decir que nuestro movimiento es muy pequeño y que es imposible para vencer sus estructuras territoriales a nivel nacional o vencerlos con los pocos recursos que podemos tener, a diferencia de ellos que tienen decenas de millones de dólares en recursos y estructuras territoriales gigantescas.
Que es imposible que un movimiento compita con esas estructuras. Me causó indignación cuando un político dijo que el FMLN era una maquinaria electoral. Me causó indignación porque yo fui parte del FMLN y a mí siempre se me dijo que el FMLN no era una maquinaria electoral, sino que el FMLN era un instrumento para la revolución, para buscar la justicia social del pueblo salvadoreño.
Millones de personas votaron, precisamente por buscar esa justicia social, personas como yo confiamos en ese proyecto y estoy seguro que muchas de las personas que nos están viendo también escucharon eso.
Los más de setenta y cinco mil caídos en la guerra no cayeron para crear una maquinaria electoral y sin embargo no solo ahora son una maquinaria electoral porque lo digan, o porque lo sean y lo demuestren con sus hechos, sino que hacen alarde y se jactan de hacerlo.
Me causó indignación, y bueno, pero la verdad es que son la realidad, tanto el FMLN como ARENA son maquinarias electorales al servicio de dos oligarquías. Como dice alguien la oligarquía tricolor y la oligarquía roja.
Pero al decir eso están despreciando a la mayoría de los salvadoreños, al 70 por ciento de los salvadoreños que no quieren ni ARENA ni al FMLN. A esa gran mayoría de salvadoreños que tenemos un denominador común. Talvez no pensemos todos iguales en todos los temas, talvez tengamos ideologías un poco distintas, pero al final de cuentas tenemos dos cosas en común. Queremos lo mejor para nuestro país y estamos hartos del sistema político tradicional, estamos hartos de los dos partidos mayoritarios, estamos hartos del bipartidismo, estamos hartos de la partidocracia, estamos hartos de ARENA y estamos hartos del FMLN.
Si lo vemos así, ellos tienen razón en algo, será difícil para nosotros construir una estructura territorial o conseguir los recursos que tienen ellos en poco más de un año para las elecciones presidenciales, si lo vemos de esa manera, incluso ellos ahorita están solicitando 40 millones de dólares de nuestros impuestos para financiar sus dos campañas electorales que vienen, 40 millones de dólares en un país donde no hay medicamentos en los hospitales, en donde el director del Hospital Rosales acaba de decir que el hospital ya no puede funcionar, en donde las personas hacen colas esperando hacerse una hemodiálisis por insuficiencia renal no pueden hacerla por falta de tubos o por falta de algodón, donde gente llega con tratamientos de cáncer y le dan cita para dentro de ocho meses.
Yo hice una propuesta que esos 40 millones de dólares fueran para los hospitales, para el hospital Rosales y para los demás hospitales de la red nacional de hospitales públicos y se me acusó de populista y de demagogo.
Yo quiero preguntar a la gente que está haciendo cola en los hospitales públicos si realmente consideran demagogia darle esos 40 millones de dólares, en lugar de dárselos a los partidos políticos que no apoyamos, que nos están obligando a que con nuestro impuestos paguemos la campaña de los partidos políticos que no apoyamos y en lugar de eso este dinero, que ya lo tienen, sea dirigido para los hospitales y para la gente que necesita urgentemente atención.
Alguien dijo que esa no era una solución de largo plazo, nadie está diciendo que es una solución para el largo plazo, por supuesto que nuestro país necesita cambios estructurales, cambios que no se hicieron en los 20 años de ARENA y cambios que no se hicieron en los ocho años que lleva el FMLN, pero sí es una solución que arreglaría el problema.
Preguntémosle a esas personas que están en los hospitales con qué propuesta están de acuerdo, preguntémosle si ellos quieren que los 40 millones vayan a financiar partidos políticos que no apoyan , porque el 70 por ciento, según todas las encuestas, de la población no apoya ninguno de los dos partidos políticos y el ochenta y cinco por ciento de la población no apoya ninguno de uno de dos específicos partidos políticos tradicionales mayoritarios, es decir que al ochenta y cinco por ciento nos están obligando con nuestros impuestos a financiar un partido político que no nos representa y que no queremos apoyar, pero obligatoriamente tenemos que financiarlo porque ellos crean las leyes que precisamente nos quitan nuestro dinero para financiarse ellos.
Y no solo se financian de esa forma, también aprobaron una ley para ocultar a sus donantes, porque también se financian con dinero oscuro y, a la vez, quieren aprobar una ley para evitar que los movimientos ciudadanos puedan financiarse, es decir no solo quieren sacar el dinero de sus bolsillos para poder financiarse, no solo quieren ocultar sus grandes donantes sino que quieren evitar que los nuevos movimiento se puedan financiar, por eso es que les dije que una sola golondrina no hace verano, pero millones de golondrinas si hacen verano, porque una golondrina puede ser eliminada así, si se tratara de mi o de una candidatura, a mí me pueden eliminar fácil, ya me han inventado varios juicios ridículos y estoy seguro que pueden inventarse otros cuatro o cinco más, a mí me pueden inhabilitar, me pueden evitar una inscripción de una candidatura, pueden crear nuevas leyes para impedir no solo financiamiento, sino otras cosas, me pueden meter preso, me pueden matar, etc., pero no pueden hacerlo con millones de golondrinas, no pueden evitar que millones de salvadoreños quieren que su país cambie, pueden detener a una, pueden detener a dos, pueden detener a tres, pero no pueden detener millones, ni que lo quieran, no hay suficientes diputados, no hay suficientes instituciones, ni pueden hacer suficientes leyes para detener a millones de salvadoreños, que todos estamos hartos de ellos y que los queremos sacar de donde están.
Lo que hemos visto en los últimos días es que la gente se ha organizado desde que anunciamos el movimiento, es que la gente se ha organizado de una manera natural y espontánea, se han organizado grupos en las colonias, se han organizado páginas de Facebook, grupos de WhatsApp y se han organizado naturalmente. Eso nos ha reafirmado, nos ha confirmado que es el único camino a seguir, el dejar que la gente se organice por sí misma, el de no tratar de hacer una estructura territorial partidaria con millones de dólares en recursos, porque no queremos eso, queremos que la gente se organice, que el pueblo salvadoreño se organice por sí mismo. Creen grupos de WhatsApp, creen páginas de Facebook, hagan grupos en su colonia, hagan grupos en su pasaje, hagan grupos en su comunidad, hagan grupos en su colonia, en su municipio, en su barrio, en su cantón, en su caserío, hagan grupos de jóvenes, hagan grupos de gente mayor, si son un equipo de fútbol, hagan un grupo de su equipo de fútbol, son un colectivo de artistas, hagan un grupo de colectivos de artistas, hagan grupos distintos. No tienen que pedirle permiso a una dirigencia para lo que tienen que decir, si quieren postear algo en Facebook, replicando algo que yo dije o a favor de algo que yo dije, les agradezco muchísimo por eso, pero si quieren criticarme también pueden hacerlo, porque en un movimiento real y horizontal no hay jefaturas, nadie puede ser expulsado por un tribunal de ética por criticar a alguien, ni por decir su opinión, ni por disentir, ni por diferir en lo que cree que es lo mejor para el país, no tienen que pedir autorización para publicar lo que quieran o para emitir una hoja volante o un comunicado, no tienen que pedir autorización para nada porque aquí no hay cúpulas, aquí no hay dirección del partido, aquí no hay secretario general, cada quien puede decir, hacer lo que quiera, sin embargo para tener identidad, para que todos nos sintamos parte de un solo mismo cuerpo, esos millones de salvadoreños que queremos un cambio para nuestro país, hemos querido llamarle a nuestro movimiento: NUEVAS IDEAS.
Primero porque necesitamos nuevas ideas y, segundo, porque así tendremos una identidad que nos unirá de alguna manera, aunque con nuestras diferencias y nuestra diversidad, pero nos unirá con este nombre: NUEVAS IDEAS.
Lo segundo es que este movimiento tendrá dos reglas, solo dos reglas, la primera que todos los miembros, todos sus miembros, todos sus cientos de miles, millones de miembros quieran lo mejor para el país, está fácil ¿no? y la segunda es que todos pensemos en sumar, no en restar, no puede venir un ex arenero a sacar a alguien porque es ex FMLN, o alguien que prefiera un partido de equipo de fútbol sacar a alguien que prefiere otro equipo de fútbol, aquí vamos a sumar y los grupos servirán para varias cosas, en primer lugar para unirnos, para organizarnos, en segundo lugar los grupos servirán para llamar a más gente a unirse a los grupos, a unirse a este movimiento, si el vecino no está convencido, pues toca ir a convencer al vecino, si la mitad del equipo de fútbol está convencido, pero la otra mitad no, pues toca ir a convencer a la otra mitad, si vamos a tocar puertas del pasaje para convencer a las personas que aún no están convencidas, pues toquemos las puertas del pasaje, esa será una de las labores de estos grupos.
La otra labor de los grupos es analizar la coyuntura, los problemas y las soluciones de la realidad nacional. De esta manera generaremos no un debate, sino cientos de miles de debates diseminados alrededor del país que al final lograremos amalgamar para hacer un proyecto de nación que no venga de una cúpula, sino que venga realmente del pueblo salvadoreño.
Y la tercera es estar preparado, estar preparado por las luchas que vendrán, luchas por un mejor sistema de salud, luchas por mayor seguridad, luchas por un mejor sistema de educación, luchas por justicia social, luchas para cambiar el sistema político del cual ya todos estamos hartos. Esto servirá para estar listos.
Nombraremos 14 emisarios, uno por cada departamento, esos emisarios no tienen ninguna jerarquía sobre los grupos, no podrán dar órdenes, no podrán llegarles a decirles qué hacer, o qué decir, cada grupo tendrá total autonomía, cada grupo está autorizado en nombre del movimiento para decir lo que quiera, siempre y cuando respetando las dos reglas, lo mejor para el país y sumando, no restando, pero cada quien puede decir del movimiento, incluso criticar lo que alguien otro del movimiento diga. En nuestra diversidad estará nuestra fuerza. Estos emisarios no servirán para darles directrices, no tendrán jerarquía sobre ninguno de los grupos. Estos emisarios tendrán una función y su función será ayudarnos a organizarse y ayudarnos a amalgamar los grupos en el momento que necesitemos demostrar la fuerza para cambiar realmente nuestro país, para poder amalgamar esos cientos de grupos que, de toda la diversidad que tengan y amalgamarnos todos para una sola causa en común, cambiar nuestro país y cambiar el sistema político actual del cual ya todos estamos hartos, destruir el bipartidismo, la partidocracia, el sistema corrupto que nos ha tenido en el subdesarrollo por los últimos 196 años desde que declaramos nuestra independencia.
Yo creo que es algo en el que todos podemos estar de acuerdo y si lo hacemos así, y si empezamos a unirnos en grupos vamos a ser más grandes, mucho más grandes que cualquier partido político. Ellos se jactan de ser maquinarias electorales, pero se les olvida que nosotros no queremos ser una maquinaria electoral; somos los salvadoreños que estamos hartos de ellos y somos muchísimos más fuertes que ellos y somos muchísimos más en número y si bien no tendremos esos recursos, no los necesitamos, porque tenemos la fuerza del pueblo salvadoreño. Así que Dios los bendiga a todos, que Dios bendiga a sus familias, que Dios bendiga a nuestro país, unámonos para arreglarlo y hagamos historia».