Ante la cercanía de los comicios municipales y legislativos del 4 de marzo de 2018, la Universidad Centroamericana (UCA) hace un llamado al Tribunal Supremo Electoral (TSE) a mejorar su capacidad técnica y operativa para garantizar que en El Salvador no suceda lo que acaba de ocurrir en la hermana república de Honduras.
Las próximas elecciones suponen nuevos problemas técnicos y retos que pondrán a prueba la capacidad del Tribunal Supremo Electoral, destaca un reciente editorial de dicho centro de estudios superiores.
Según la UCA, en primer lugar la despartidización del TSE y las Juntas Receptoras de Votos, requieren implementar un eficiente proceso organizativo y formativo para la buena realización los comicios.
En segundo lugar deberá estar bien resuelto y de manera totalmente transparente el conteo de los votos, complejo de por sí por la introducción de la elección cruzada y por rostro, y por el empeño en fraccionar el voto, sobre todo cuando la participación de los ciudadanos es baja y los resultados no representan a la mayoría, sino al voto duro, a la militancia de cada uno de los partidos políticos en contienda.
«El mal ejemplo que ha dado el Tribunal Supremo Electoral en Honduras deja clara la importancia de contar con un organismo independiente, con capacidad técnica y credibilidad. Nada de lo ocurrido en el vecino país es aceptable en una democracia… Nuestro Tribunal Supremo Electoral debe tomar nota atenta de ello para evitar un descalabro semejante», sostiene el editorial.
Según la UCA, Ees fundamental evitar la mezcla explosiva de una democracia que no ofrece lo fundamental a toda la población y que falla en garantizar el respeto a la ley y un proceso electoral sin garantías técnicas ni credibilidad, porque «de los efectos funestos de la confluencia de ambas cosas tenemos hoy una muestra al otro lado de nuestras fronteras».
