Uno de los máximos líderes del FMLN, José Luis Merino, acotó que todo lo «conquistado» en 10 años de gobierno puede perderse, aceptando así
el descontento y desconfianza que la población salvadoreña tiene sobre ese partido.
“Hoy existe la amenaza de que lo que hemos acumulado en diez años se pueda borrar», dijo el militante.
El FMLN es un partido político que desde sus inicios pregonó estar del lado de los más necesitados del país, sin embargo al lograr llegar al poder y enriquecerse perdieron el rumbo, han expresado diferentes analistas.
La falta de políticas públicas a favor de los salvadoreños, el despilfarro de dinero del Estado y sus vínculos con la corrupción minaron su camino político; y luego de 10 años de gobierno se han convertido en oposición.