La Iglesia y la feligresía católica realizan este 24 de marzo varias misas y peregrinaciones en diferentes lugares del país para recordar el 38 aniversario del asesinato del beato Óscar Arnulfo Romero.
En catedral metropolitana, la solemne eucaristía, con motivo del 38 aniversario del martirio del beato Óscar Romero, fue presidida por el arzobispo de San Salvador, monseñor Luis Escobar Alas, el cardenal Gregorio Rosa Chávez y varios sacerdotes.
El cardenal Gregorio Rosa Chávez dijo que el pueblo en general debe unirse en torno al beato Romero para lograr la paz que tanto necesita El Salvador.
Cientos de feligreses llegaron a tempranas horas de este sábado para escuchar la homilía en recuerdo del execrable crimen que acabó con la vida del religioso, que va camino a los altares, por decreto del papa Francisco.
En Ciudad Barrios, cuna del nacimiento de Romero, también se realizará una solemne misa, a la cual llegarán caravanas de diferentes lugares del país para sumarse al evento religioso.
Mientras en la Plaza al Divino Salvador del Mundo, otra peregrinación llegó a media mañana para participar de un acto en memoria del obispo mártir y luego partir hacia la cripta de monseñor Romero en catedral metropolitana.
Monseñor Romero fue asesinado al final de la tarde del 24 de marzo de 1980, mientras oficiaba una misa en la capilla del Hospital Divina Providencia, en la colonia Miramonte. Según las investigaciones, uno de los que conspiraron para matarlo fue el exmáximo líder de ARENA, Roberto d’Aubuisson, quien habría encargado la misión a un francotirador que era suboficial de la disuelta Guardia Nacional.
Monseñor Romero se caracterizó por ser el «voz de los sin voz», que desde el púlpito reclamaba en sus homilías dominicales mejores condiciones de vida y el respeto a los derechos humanos de los desposeídos, quienes eran vistos como «comunistas» por los regímenes militares de finales de la década de los 80.