El gobierno de Honduras rechazó la sugerencia de la Organización de Estados Americanos (OEA) para realizar nuevas elecciones presidenciales, luego de las acusaciones de fraude de la oposición y dudas de observadores internacionales sobre la transparencia de los resultados.
“No habrá otra elección”, señaló en rueda de prensa el vicepresidente de Honduras, Ricardo Álvarez, mientras en las calles simpatizantes de la oposición mantenían bloqueadas calles y carreteras en rechazo a la declaración del presidente Juan Orlando Hernández como ganador de los comicios del 26 de noviembre.
“La única elección es la que se realizará dentro de cuatro años”, añadió.
El tribunal electoral de Honduras declaró el domingo que el ganador de los comicios fue el actual mandatario, lo cual desató de inmediato críticas del candidato opositor Salvador Nasralla y de sus seguidores, que han dicho que no reconocerán los resultados.
El mismo domingo, la OEA -que envió una misión de observadores para los comicios- señaló que era imposible determinar el resultado con suficiente certeza por irregularidades cometidas en el recuento de los votos, por lo cual consideró que lo mejor “es un nuevo llamado a elecciones generales”.