El excanciller alemán Helmut Kohl, gran impulsor de la reunificación de Alemania y europeísta convencido, falleció la mañana de este viernes, a los 87 años en su casa de Ludwigshafen, según informa el diario ‘Bild’ en su edición digital.
El histórico líder democristiano fue una figura clave en los acontecimientos en torno a la caída del muro de Berlín, en 1989, y en el proceso que condujo a la reunificación alemana un año después. Fue también el gobernante que estuvo más tiempo al frente de su país en la posguerra; fue canciller de 1982 a 1998, primero solo de la Alemania occidental y, desde 1990, de la Alemania reunificada.
Helmut Kohl (nacido en 1930) había estudiado Historia y Ciencias Políticas en la Universidad de Heidelberg, y a los 15 años de edad entró en las juventudes del recién fundado partido democristiano, la CDU. En 1973 se convirtió en presidente del partido, y un decenio después logró convertirse en canciller.
Su gran logro fue supervisar la reunificación de Alemania, y otro de sus empeños políticos fue la construcción de una Europa de paz y prosperidad, fundada sobre todo en la amistad franco-alemana. En los primeros años noventa se convirtió en mentor de una política de la Alemania oriental, la ahora canciller Angela Merkel, a la que en 1991 nombró ministra del primer Gobierno de la Alemania unificada.
En sus años de gobernante, trabó una sólida amistad con el fallecido presidente francés François Mitterrand, y también le unieron lazos de amistad con Mijail Gorbachov, el último dirigente de la extinta Unión Soviética. Tras la derrota electoral de 1998, Kohl quedó también marcado por el escándalo que estalló en 1999 al conocerse donaciones irregulares a su partido, la CDU. Kohl se vio obligado a dimitir como presidente del partido.