Mientras cientos de guatemaltecos salen a las calles a protestar en contra de los diputados, éstos se mantiene refugiados para evitar a la turba violenta de ciudadanos que salieron este sábado a las calles.
El Congreso de Guatemala fue tomado por los ciudadanos enfurecidos y posterior a eso, prendieron fuego a uno de los ventanales, sin embargo, la Policía Nacional los repelió con gas lacrimógeno.
El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei rechazó las protestas y advirtió que a quién se le encuentra dañando la propiedad privada o pública se le dejará caer todo el peso de la ley.