El país centroamericano con más infecciones y muertes por COVID-19 está a punto de llegar a las 12,000 defunciones. Desde el inicio de la pandemia, el 13 de marzo, y hasta el 30 de agosto, Guatemala sumó 11,926 fallecidos; sin embargo, según el Registro Nacional de las Personas, la realidad aún es peor.
En agosto, por seis días consecutivos se identificaron más de 70 muertes cada 24 horas. El 13 de agosto se convirtió en el más enlutado en ese mes, con 79 defunciones. El 20 y 25 hubo 77 decesos cada día; el 26 de agosto fueron 74 víctimas. El 6 del mismo mes, 70 personas perdieron la vida, y el 14 de agosto, el ministerio publicó que fueron 69.
Sin embargo, un informe con datos hasta el 7 de agosto del Renap indica que Guatemala registró un exceso de mortalidad de un aproximado de 29,352 muertes de todas las edades, y al menos 15,865 defunciones estuvieron asociadas al COVID-19.
Guatemala no es el único con este panorama sombrío por el coronavirus. En muertes le sigue Honduras, con 8,850 víctimas; luego Panamá, con 7,054; y Costa Rica, con 5,492.