La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, anunció la restricción de movilización más estricta del mundo debido a la aparición de más contagios de COVID-19 en su territorio, a pesar que sólo han muerto 4 personas.
En Nueva Zelanda nadie puede salir de casa, a menos que su trabajo sea esencial, detección rápida de la enfermedad, ratreo y aislamiento de nexos epidemiológicos, estricto control fronterizo, cumplimiento del aislamiento social, entre otros.
«No me disculpo. Este es un momento sin precedentes», aseguró la Primera Ministra al anunciar las estrictas medidas para frenar los contagios de coronavirus que ya suman 1,330.
