La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES) denunció que El Salvador está en un retroceso de las libertades individuales, y que especialmente se cierne una amenaza de cierre de espacios ciudadanos, que atenta contra la democracia e institucionalidad del país.
En un comunicado, la organización confirmó que: «No es, no ha sido, ni será enemigo de ningún gobierno; no es ni ha sido, ni será una oposición partidaria para nadie. Pero sí hemos sido, somos y seremos una fuente de pensamiento libre, que cuestiona y aboga por la democracia e institucionalidad del país».
Asimismo denunció que, junto a otras organizaciones de la sociedad civil, ha sido objeto de amenazas de cierre, por parte del Gobierno y algunos diputados, -bajo acusaciones y especulaciones totalmente falsas-.
Por ello llamó la atención de los salvadoreños y la comunidad internacional, para estar atentos sobre lo que califica como «un proceso progresivo y permanente, cuyo objetivo es callar voces, análisis y opiniones disidentes».