El FMLN votó a favor de la extensión del subsidio al transporte público de pasajeros pero sin poner ninguna condición que obligara a los transportistas a comprometerse por mejorar el servicio que brindan a la población.
Las demás fracciones legislativas quisieron poner condiciones a los dueños de buses y microbuses, no obstante, no se llegó a un acuerdo, con lo que el FMLN logró su objetivo de no condicionar a los empresarios a mejorar el servicio.
Los dueños de las líneas de transporte público exigieron que se les otorgara el subsidio pese a encontrarse, por parte de las autoridades del VMT, unidades inexistentes y otras en reparación que eran registradas como activas sólo para cobrar el beneficio del Gobierno.