El fiscal general de la República, Douglas Meléndez, encabezó la rendición de cuenta de la entidad que presiden asegurando que en un año y medio se ha ordenado la casa y se la perseguido el delito logrando avances sustancias en el combate al crimen organizado y la corrupción.
“En año y medio hemos hecho el trabajo de ordenar la casa, pero también de perseguir el delito cuesta arriba”, dijo durante conferencia con medios de comunicación.
Según Meléndez, la corrupción, el narcotráfico y los bienes del crimen organizado no estaban siendo atacados en las gestiones anteriores. El funcionario, fue contundente al aseverar que uno de los mayores problemas es el poco recurso y la sobredemanda; actualmente el presupuesto tiene un déficit de $22.2 millones de dólares.
En promedio, cada fiscal tiene más de 200 casos asignados. “Con esta carga de trabajo que tenemos y sin un presupuesto adecuado, se hace más difícil nuestra labor”, dijo.
Detalló que por extinción de dominio son 142 inmuebles incautados, 33 casos de corrupción entre estos 8 requerimientos contra ex funcionarios.
«En delitos de corrupción se han presentado 41 casos que suman más de $26 millones, porque estos Ilícitos laceran nuestra sociedad (…) no es posible que funcionarios corruptos se estén enriqueciendo, entran con 1 vehículo y salen con 11 como propietarios», acotó.
Aseguró que a su llegada encontró una fiscalía influenciada por entes externos, que se estaba prestando a situaciones irregulares, esto sumado a amedrentamientos, amenazas y conspiraciones contra la labor de la entidad.
Meléndez indicó que en su gestión se han judicializado 2,124 casos de homicidios y 119 casos de feminicidios y otro de los logros es que se ha pasado de atacar el menudeo a estructuras más grandes en la investigación de narcotráfico.
